domingo, 30 de marzo de 2008

>> Extrañezas

Ayer sábado me moví por las calles de Majadahonda, es un pueblo de por ahi, más bien feo, como el mundo al revés: un pueblo hecho alrededor de una carretera, una cosa así, a mi desde luego no me gusta nada este pueblo. Pero menos me gustan esas ceremonias y me tuve que comer el bautizo, los chillidos del hermano del bebo de tres añitos y cargar del brazo de la que sería mi suegra, reciente viuda.

Todas esas gentes son de Ciudad Real, yo no sé el por qué el hacer vida en un pueblo de madrid, bueno sí, pero qué simpleza y qué mal rollo. Este tipo, se llama Juan Carlos y es cocainómano. Nos pusimos una loncha en su casa tras atarle el nudo de la corbata, volvió a ponerse antes de bajarse del opel astra el cual sigue pagando todos los días quince de mes y nos metimos otra raya a la salida de la ceremonia cuando ya por fin se animó un poco aunque a mi la misa se me hace larga y no me puedo estar quieta.

Alli ya en el coche tras ponernos la que sería la última, me mete mano, me paga, me saca una teta y me la aprieta mientras me explica que comeremos en un restaurante y que vamos en su coche, que a su hermano Cristóbal el que bautiza le he gustado porque tuvo una novia que se me parece y todo esto me lo cuenta mientras con una mano se está tocando.

Al momento estamos detrás y espera un largo y delicioso minuto a que la gente que hay fuera monten en el coche de al lado mientras está jugueteando con sus dos dedos buscándome el punto. No deja ni un momento de hablar, imagino que para templarse y en un momento me sube encima de él abriéndome apartando el tanga y me dice mientras se la saca que no puede irse a comer sin comerme primero el culo, que sabía que lo tenía duro desde que me lo tocó en la iglesia, y que me lo tocó así,

-así, hice así-

y en el así lo que hizo fue sentarme sobre su polla poco a poco, despacio, la recibí totalmente erecta, entró de una sola vez y logró acomodarse y una vez dentro comenzó a marcarme el ritmo cogiéndome bien por la cintura.

Yo y mis ganas la recibimos perfecta, la empapamos, por dos veces se salió y por dos veces hubo que meterla y en esta segunda vez me descubrió la otra cueva y así en un dos a uno provocó que me pegase a él, sometida, esperando el embite y esto le sirvió para tomar mejor posición y medio tumbado comenzó a empujarme con más ímpetu de forma que mi culo chocaba con sus pelotas haciendo ese ruido extraño y reirme decía que le excitaba más y más me reía y se llevó una mano para taparme la boca mientras se corría entre golpes contra el sillón.

Llegamos una media hora tarde cuando todos estaban colocaditos en las respectivas mesas dispuestos para el banquete, el Juan Carlos no hacía otra cosa que ajustarse la corbata como si le sobrara y se pasó media comida metiéndome mano por debajo de la mesa haciendo el idiota, yo por mi parte tenía bastantes ganas de salir de allí.

El caso es que regresé pronto porque había quedado con el Julio en tomarnos unas copas por el centro y me vine tras beberme la segunda porque el tremendo no estaba y Julio me atosiga un poco con su hermanismo.


jueves, 27 de marzo de 2008

>> Rel / Redativizando haciendo círculos

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Entre la mierda del cambio climático, la polución, el jaleo de tráfico en horas punta y sin despuntar, las fábricas a todo gas en madrid y demás aqui no hay quien respire y por echar las culpas a alguien se las echan a los negritos del áfrica y aquellos aires. aclaración nº 10. Hijos de puta, por culpa de su puta madre tengo yo ahora un virus de no se qué en forma de resfriado y estoy malísima.

No he salido de casa en todo el día, tampoco me fue necesario y he estado haciendo cositas. Lo primero, esta mañana, masturbarme en la bañera. Me gusta hacérmelo con el agua calentita, sin excentricidades de ningún tipo, solo ayudándome de estos deditos míos que tengo de siempre. Ya no tengo luna, me cansé y me la he depilado y ayer vinieron al fin a darme presupuesto para cambiarme la bañera, se me ha antojado una concreta, enorme, con sus patas, y es una pasta, pero quiero verme en ella, dentro, últimamente vuelvo a no encontrarme del todo agusto, no estoy yo follando del todo en condiciones aunque el martes no estuvo mal pero no sé si será cosa de otra puta racha sin motivos aparentes, o cosa del mes de marzo o qué pasa.

He estado releyendo de cuando me dicen que el Héctor da lástima, cosa que ya sé de lo contrario no se la chupaba, y que el Jesús era un hijo puta, cosa que no tardé mucho en ver, así que he pensado que estoy aprendiendo muy poca hostia y como haga yo algún avance y me equivoque la culpa la va a tener esta mierda que aquí quedan escritas mis ganas de echarle un polvo al Angel y de no conseguirlo no me da la gana el pasar a ser la zorra herida o algo por el estilo.

Pero en fin, monitorileyentes y monitorileyentas, el caso es que hoy he vuelto a enREDar y hoy quiero hablaros a vosotros y al aire del enamoramiento, de la literatura, de la ignominia que no sé lo que es y de lo que me parezca porque aquí escribo yo y hoy tengo necesidad de escribir:

Yo lo del enamoramiento no lo comprendo, creo que hay tantas acepciones de ello que yo llega un momento en el cual me pierdo, dependiendo qué tipo de persona te encuentres así te dirá, la mayoría de enamoramientos nacen de necesidades y de masoquismos varios, eso pienso. Lo que pasa es que al cubrir la necesidad o cumplir el masoquismo es tal el estado de plenitud que entre lo gilipollas que tenemos tendencia a ser y lo plenamente gilipollas que nos volvemos completamos el círculo y se nos puede rodear diciendo

-déjal@, está enamorad@-

Y esto en este siglo y en el pasado viene a ser: estar más muerto que vivo. Es como decir de ti que eres subnormal profund@. Y yo, yo rozo la tontería solo por despiste así que yo a lo mío, cubriendo mis necesidades a base de polla pero a necesidad cubierta prueba superada y a otra cosa mariposa.

Entonces ahora se me antoja decir que viva el refranero espanyol que hace de lo dicho un arte que es la literatura, he leido hoy también supuesta literatura y pareciera que se lee amor pero solo se lee mierda, el amor se trabaja y a la gente no le gusta trabajar por eso se folla más de lo que se hace el amor. aclaración nº 8 - 4ª. Aunque esto que yo escribo no es literatura ni nada eh, es una guarrería, sí, qué pasa, para gustos los colores y para risa la mía, hay cosas mucho más chulas que escriben por ahi, cuidan el lenguaje y lo que hacen con la lengua y yo aquí escribo lo que me da la gana, mi puta vida porque aclaración nº 9.

A mi me da igual morirme mañana, creo que ya lo dije, me toca la polla, yo lo que pretendo es vivir como quiera y cuando no pueda yo me largo, aquí no me voy a quedar parasitando, no quiero eso. Acabo de percatarme a propósito de literatura que sin darme cuenta existe en este texto una paradoja muy así, comencé hablando de lo que para muchos es la vida: el enamorarse/leer muchos libros y termino hablando de la muerte, qué cosas.

Y hablando de muerte hay veces cuando voy en el metro a algún sitio que voy en el vagón observando a las gentes y a ratos si veo a alguien pienso en que si alguna vez me llama y me presento y es él alli no me quedo ni muerta. A veces pasa esto y cuando no puede ser no puede ser y punto, a veces es gracioso pero otras veces no, hay toda clase de gilipollas.

Hay toda clase de gentes, es cierto, para gustos los colores y blabla, algunos son simpáticos o directamente con gracia pero es una lástima que esto de tener gracia o ser gracioso siempre es por algún motivo: o alguna desgracia y hay que reirse por no llorar o por ponerse hasta el culo de algo, bien sea de marihuana o de hincharse a follar, pero no se es gracioso por naturaleza, no, es una pena.

Ayer por la mañana se lo decía yo esto al Vicente, el del bar de abajo, tras hablar de no se qué y me preguntó que para cuando me lo voy a hacer con él y yo me eché a reir porque se trata de una aproximación a Constantino Romero sin bigote, y me hizo gracia e hizo bien, es su mejor baza. Si no fuera así de feo no me habría reido, así de claro.

Los discapacitados sea cual sea la falta siempre por instinto o por lo que sea [yo soy zorra no socióloga] pero a esas gentes se les desarrolla en proporción otros atributos o no sé pero llevan un plus, eso es seguro. Un ciego te ve perfecta porque es como eres y te sientes espléndida porque te toca con las pupilas clavadas en el techo, a un tartamudo se le consiente que se escurra mientras da el aviso que en un momento u otro se va a correr, no te queda más remedio que escucharle, a un sordo hay que hablarle directo a los ojos, se le habla mientras se va con él en la cabeza de un sitio a otro y que te lo vea, de frente, y es que es menester hacerse entender.

Y es que más que discapacidades son necesidades que se crean, si a uno le pica la mano se tiene que rascar, si no la tuviera no le picaba, esto es así, ya dije al comienzo que yo tenía necesidad de escribir y eso es lo que estoy haciendo, escribiendo y a necesidad cubierta... (ant). Espero follar el sábado que he quedado y así luego podré escribir de otra cosa, ya se lo comenté esta mañana al semiempastifista que no trabajo hoy (ni mañana tampoco).

aclaración nº 7 también.



miércoles, 26 de marzo de 2008

>> Patías varias

Ayer me encontré con la horma de mi zapato o como quiera que sea esa expresión, hay gente muy cabrona por ahí eh. Para empezar me tuvo esperando allí en la parada de metro de islas filipinas más de un cuarto de hora y al sol. Llega, se presenta como Luis y me suelta un beso en el ojo. Dice que vamos primero a tomarnos unas cañas y en el siguiente paso que da constato que ya se ha tomado unas cuantas.

En el bar donde entramos le conocen los dos camareros y le llaman por su nombre y apuesto que le debe conocer también la señora que vaya a limpiar los baños por la mañana. Se deja más de quince euros en la máquina de la esquina, le extiende la quiniela de no sé cuando al camarero más jovencito, no le ha tocado nada, da un golpe en la mesa y dice que el Valladolid debería estar en tercera. Ahí creo que es cuando se da cuenta que ha entrado allí conmigo y se le escurre la cerveza y se hace cachos cuando me oye decir

-en Zorrilla habrá tardes que haga un frío que pela-

No me salpica porque estoy en lo alto de un taburete, apoyada en la barra, pero aún así se disculpa. Me dice que para el frío lo mejor es abrigarse y me coge las muñecas y me cierra bien los puños, divertido. Extiende cincuenta euros en la barra y después recoge el cambio. A partir de entonces se suceden los acontecimientos repentinos, está separado, dice que tiene dos hijos y son los que entran por la puerta. Me da la risa, dice que el crío se llama Benito como su abuelo y a mi me vuelve a dar la risa de nuevo y la chica, muy mona ella, tiene diecisiete años y cara de pocos amigos.

Desde allí pasamos algo más dentro, a una especie de comedor minúsculo y acto seguido el chaval que dicen que tiene nueve años analiza la carta y se pide siete raciones aunque después no se pida nada. Luis pone cara de poker porque la chica le dice que ha estado bebiendo, la tranquilizo,

-eh, vamos, hemos tomado unas cañas pero porque hoy me han ascendido y lo estamos celebrando-

pero se revuelve clavándole los ojos al padre

-¿y esta quién es?- pregunta con cierto desprecio

-la zorra que ahora está saliendo con tu padre-

Me mira atónita y hace un gesto expirando. Se gira de nuevo a él y le indica que su madre está fuera, en el coche, que dice que si iba bebido no bajaba, que la daba vergüenza. Yo pienso entonces que al menos era vergüenza y no pánico. Él la intenta explicar a trompicones que lleva seis meses saliendo conmigo, que está bebiendo menos, que ya solo bebe los martes y los sábados, qué gracioso, creo que no le creímos ninguno de los tres.

En cuestión de diez minutos los chicos se fueron y él parece comenzar a sentirse algo culpable y me cuenta que esta situación se viene dando cada ciertos días pero que en el fondo no le apetece nada volver a su casa, que no quiere a la mujer, que hace ya más de seis años que no la quiere pero que no tiene huevos para explicarle, dice preferir que sus hijos le tengan como un desgraciado antes de que le tomen por un hijo puta, parece tenerlo claro.

Antes de salir del sitio regresa con sus cuatro euros de cambio a la máquina de la esquina, se acaba su cerveza y a la pregunta del camarero de adónde vamos ahora él le contesta que a echar un polvo que es el mejor sitio a donde llevarme. Al poco rato estamos en un tres estrellas y en lo que tarda en quitarse la camisa ya me está chupando las tetas y ante mi sorpresa apaga la luz de la habitación diciendo,

-así, es mejor porque cuando bebo mucho luego me mareo-

No se veía absolutamente nada y cuando el sexo es bueno esto lo agradeces porque disfrutas en lo oscuro sin nada feo que interrumpa ese disfrute. A nadie le gusta tirar de cuerpo y constatar que estás tirando de grasa o darte cuenta mientras ya te está dando y te gusta que está completamente desnudo pero que los calcetines ahí siguen, por ej, y con la luz apagada estas son cosas que te ahorras. aclaración nº 15.

Paso al baño porque me ha chorreado toda la pierna y no le da la gana de beberme a mi tampoco, cuando salgo de nuevo al dormitorio le indico que hay sobre el lavabo un tanga gris y que he tenido uno exactamente igual y me da la risa porque le encuentro ya con la luz encendida fumándose un cigarro tirado en la cama y me dice que me lo lleve si quiero aunque no sea mío, que debe ser de Vanessa que estuvo allí la otra noche.

Antes de irme me pide que le deje un par de euros que tiene que bajar a por tabaco, y a por tabaco es donde me voy yo al cabo de un rato tras dejarle la moneda en la mesita pero se lo doy solo porque se pone un poco tonto y en su petición me está besando los codos y porque me ha gustado más con él que con el Javier en cinco días.


lunes, 24 de marzo de 2008

>> Destrangis

[ convendría leer antes Ampurdeando ]

Joder, menudo viaje, esto ha sido como el viaje al centro de la tierra, vine hace un par de horas y no he vuelto hoy debido a un arrebato o algo, no, volvimos pues un sobrino de este se dejó la piel en la carretera de Valencia ayer tarde. No he conocido persona humana más absurda que Javier, al menos no molesta, pero va dando la nota allá donde vayamos. Todo absolutamente todo lo que le rodea forma parte del banco, de su banco. El bolígrafo con el que pide la cena a la habitación, la tarjeta con la que hace los pagos, el fondo de escritorio de su portátil y más pero él tan orgulloso y tan feliz.

Nos entendemos, yo pido y él cumple y acata; no me faltó de nada o tardaban poco en traérmelo, bueno sí, algún que otro orgasmo sí eché de menos pero para esto ya iba yo prevenida, me refería a cosas sin importancia.

Fuimos en su coche y ahi en los monegros dicen que van a hacerse un Las Vegas y yo me pregunto que si también habrá campos de golf de dónde van a llevar el agua si es un puto desierto y Javier no tiene ni puta idea, no sé, yo no tengo necesidad pero lo del trasbase del Ebro me lo sé y este hombre ni una sola conversación interesante, me trata como a una figurita de porcelanosa, pero nada, todo bien.

Paramos poco antes de llegar a Zaragoza y después ya en Girona. Me gustó la ciudad y mucho, no sabía que tenía todo aquello encantador dentro, mil y una callejuelas medievales, precioso. Para hacernos entender no hubo ningún tipo de problema solo que Javier además de absurdo es un cretino y le jode no entenderles lo que dicen. Nos indicaron muy de puta madre donde estaba la oficina de turismo y allí me le llevé despotricando en perfecto castellano detrás de mi porque se me antojó recorrernos todo aquello, catedral incluída sin que me importe dios alguno.

Ya me había dicho aquí kilo y medio que allí hablan un catalán distinto, me acordé de él y del honorable al que por cierto le ponen música propia en los partit del nou camp y me acordé a la tercera que no comprendía una mierda, resultó un poco desesperante, como irte a la china. Pero luego te acompañan en castellano y en paz por más que este se empeñe en ver falta de respeto donde no las hay.

Paramos de nuevo un rato poco antes de llegar a Roses, hicimos un alto en la carretera y me enseñó el pueblo desde allá arriba, me gustó también mucho y a él le gustó más la mamada que pidió de regreso al coche. Y unas montañas, montes o así, como escalonados separando tierras, divino, allí se fue a colocar Salvador Dalí. No sabía yo entonces un dato, PortLligat está incluso más metido aún dentro de la costa de forma que lo separan kilómetros de Cadaqués, todo precioso, genial.

Javier había reservado allí en el mismo PortLligat una habitación, me dijo antes de entrar que le hacían gracia mis ojos brillantes ante cualquier cosa y así iba yo tan feliz que todo me entraba por los ojos, no supe cómo explicárselo. No me pidió explicaciones ni las dio pero sin más tras cerrar la puerta de la habitación ya me vino detrás desabrochándose el pantalón.

Me gusta mucho, como Girona, cuando en situación yo estoy encima de él sea quien sea y ya sea en Móstoles o allá en Catalunya y todo lo que hacen con las manos es apretarme contra sí y a la vez juegan con mi otra entrada, este aún no lo había descubierto y nos gustó a los dos, tiene un dedo corazón que al igual que para el teclado del ordenador es muy apropiado.

No sé si folla esporádicamente o no pero ese primer polvo al llegar a la habitación supo a muy poco. Bastante mejor los siguientes, realmente disfruté tras recorrernos la zona, allí el panorama es como digo divino, me gustaba todo incluso los olivos del camino. Cuando todo ello me dio hambre -ya de vuelta a la habitación- mientras me explicaba que pediríamos la cena para que nos la subieran a la habitación comenzó de nuevo a probarme repitiendo eso del brillo de mis ojos.

Este es así, que por encantos apenas tiene pero se me antoja beber vodka y en cuestión de un cuarto de hora me estoy ya sirviendo el primero. Con él hablo alguna que otra cosa como que todas las parejas de los millonarios son unas putas y lo dice y explica convencido y yo que sé, cosas absurdas.

Nunca antes había trabajado yo en un restaurante de estos de carretera, esta vez sí, lo hice a la vuelta, en uno de ellos, poco antes de cruzar el meridiano ese impronunciable, cuando iba yo ya a preguntarle por su insistencia en que no me pusiera ropa interior. No hubo nada que destacar, si acaso la cara de estupefacción de la típica señora que te encuentras en el mercado a las diez de la mañana cuando nos vio salir a los dos juntos del baño.


martes, 18 de marzo de 2008

>> Hasta arriba

Cuando estoy triste no trabajo y me vengo encontrando así desde el domingo, me apetece enREDar así que prácticamente no he hecho otra cosa desde anoche; bueno sí, beber y fumar pero he leido cosas, sobre todo en algún que otro periódico digital que me da vergüenza ajena y otras que pienso que si la gente hiciera menos el imbécil todo iría mejor. Cómo puede consentirse el leer cifras de asesinadas, a elegir, por meses, al trimestre, al año, de maltratos en tu propia casa, putas estadísticas; muertos en kenia, irak, india, tíbet y fabelas del más allá, alguno que otro debe estar planeando el fin del mundo.

Me jode también hoy lo rápido que pasa el tiempo, por lo que he ido paladeando las horas a medida que han ido pasando, pero todo ello tras fumarme tomando serenidad tras comparar y comprobar los precios para instalarme la bañera grande. Y esta mañana he estado pensando en algo que también me pasó por estas fechas aprox. el año pasado así que me he recorrido el consultorio entero de la sexóloga del 20min buscando una pregunta que lei al respecto, me he tenido que leer ocho mil gilipolleces y no encontré lo que buscaba, la gente pregunta muchas tonterías, no digo aquí en el blog, digo en general.

Y esto me ha llevado a pensar también que sí, soy pecadora: peco de borde. Esto, el ser así, me ahorra sí que es cierto bastantes explicaciones y ratos insulsos pero también creo que me obstaculiza en otros sentidos como conocer gente con la t de timidez, sí. Y esto es propósito primaveral al rico verde, aclaración nº 6 - 3ª.

Sí porque sí y porque mientras yo siga aquí aclarando posiciones más en pelotas me estoy quedando, como el juego de las prendas. Está muy pero que muy bien inventado el vodka con trina de limón, sí, también, he de decirlo, y que he visto que hay gentecilla guapa y fea que después de estar baboseando por ahi se vienen aquí a aclarar las ideas, qué cosas, cómo está el mundo, cualquier día se nos viene encima y a mi puede ser que me pille debajo.

Aquí con el blog no está mal la cosa, alguna que otra perspectiva sí estoy sacando, lo importante es el movimiento, siempre, aunque hay ratos en los que pienso que aquí no se trata de personas, se trata de visiones y yo veo escasamente a 200m porque el pc me está jodiendo la vista y el gusto también, o eso parece, porque me expreso fatal.

El caso es que veo sin certezas, visiones. Veo un vasco y están él y la ría, espero que no se ahogara, un tío con una cámara al hombro, el parque Güell con un sol espléndido, una placa de la calle Nuestra señora de la luz en carabanchel llena toda entera de pegatinas humanas, otro pintando de paleta y brocha pero no sé decir el qué, ojos de todos los colores acechando y un pibe desde arabia saudí nada más y nada menos que yo no sé si se habrá enterado de algo, ah, y también hay un semiempastifista que me quedo tonta leyendo lo que se puede meter una en el cuerpo, y un sistema este que aquí la gente viene gratis y no me dejan poner anuncios, pero en fin, digo a ratos y las visiones duran un instante, siempre el mismo tiempo/espacio, siempre veo lo mismo pero un instante, qué cosas.

Y a todo esto ahora pienso que puede que las visiones de la red sean algo universal y a mi no sé cómo se me ve, qué putada. Ahora mismo muy presentable no estoy, esa es la verdad, estoy en bragas: porque sangraba muchísimo y no pienso moverme de casa, con mi batachina: que es una bata y es de corte chino, en chanclas: porque la hija de puta del 2A dice que la calefacción se terminará en abril.

Pero que sí, que peco de borde y creo que se me verá así, no se, sí, soy borde a veces hasta sin darme cuenta y cuando el que tengo enfrente es hermético perdido pues así pasa, que no pasa nada, y eso lo he aprendido aquí en el blog, es una de las perspectivas y era fácil, solo hay que ver las putas estadísticas, aclaración nº14 - 1ª, que me meo en ellas pero esta vez no fallan, lo que se me dice va con delicadeza y otros muchos ni pían siquiera por lo tanto me estoy perdiendo quizá parte de posible delicatesen con t de trabajo, en el cual, a veces, la bordería es necesaria pero si a este angelito me lo pretendo follar he de controlar eso.

Es decir, yo voy a seguir trabajando como si tal cosa pero con él creo que debo comportarme frágil y delicada, cómo me pone el hijo de puta. Ahora dentro de un rato y con otro porro en la mano voy a dejar de escribir al no saber ya lo que estoy diciendo y esta noche quiero dormir y descansar que mañana me marcho de viaje a lo más alto de este país que es espanya, regreso el martes si no me canso antes y me vuelvo.

[ cuando estoy triste tampoco me emborracho lo bastante pero eso sí, llevo una fumada lo suficientemente extensa como para acordarme ahora del jason este y me lo he traído del gugel, ya le dije al bilbo'o que este está mejor que la botella ]



viernes, 14 de marzo de 2008

>> Ché, qué bueno que viniste

Hacía mucho tiempo que no me lo hacía en un sitio público y bastantes meses más que no me follaba a un argentino, algo más de un año. Ocurrió anoche, a las siete en punto me presenté en la cafetería de la calle Martín de los Heros donde habíamos quedado en lo que era mi regreso a Argüelles.

Allí lo primero que me dice es con vos para recriminarme el hecho de llevar falda pero me gusta, es extrañamente guapo y muy argentino por lo que mientras apago mi cigarro en el cenicero de la barra le clavo los ojos y sonriéndole le digo que se largue, que estoy esperando a un pelotudo.

aclaración nº 5 - 1ª
La noche es clara y con suerte, es simpático y huele muy bien, lo que no supe es si llevaba o no mentón metido debajo de la barba así que me dediqué a explorarlo mientras él me contaba en argentino que su mujer no era en realidad su nada, que estaban enrollados como yo a los quince, cada uno hacía lo que le daba la gana, a él le apetecía acostarse conmigo aunque tenía que manejar para llevarme a su casa porque los taxis no se cogen y su mujer que no lo es me contó que trabaja o rueda o lo que sea porque es actriz de películas que jamás voy a ver como el otro lado de la cama o yo no se qué porque me dijo unas cuantas.

A mi me gusta lo que cuenta por la forma en que lo hace aunque sean chorradas y en ese café estuvimos un par de horas bebiendo hasta que llegó quien sea con bastante retraso y le entregó unas llaves y una carpeta y ya al rato salimos. Subimos hasta Rodríguez San Pedro andando y en la esquina de la zapatería me hizo pararnos y hube de elegirle un par de zapatos. Ahí ya comenzaron los besos en silencio madrileño.

Me indica que tiene más vodka arriba, que ya llegamos, que mejor nos vamos a la casa de la chica al tener la llave pero a donde llegamos es la entrada de una caja de ahorros y mientras no se despega de mi saca la cartera del bolsillo y de ella extrae la tarjeta de crédito, débito o la de vuelva usted mañana y en lo que tarda en pasarla por la banda ha abierto la puerta y me ha metido dentro mientras sigue mordiéndome la boca.

Como soy una buena mina dejo que sea él quien queda en posición de vernos por la cámara, agradece ahora el que haya acudido en falda y mientras me repite que estoy rebuena se ha sacado ya la polla del boxer y dice que quiere cogerme.

El sujetador que es la debilidad de Héctor pasó permanentemente desapercibido, anduvo bien entretenido con mis pezones mientras me tenía contra la pared alzándome la pierna derecha. Y con la pierna derecha sin tocar suelo saldré yo en una película de unos diez min. aprox. de duración echando un medio polvo en el portal del cajero automático, una guarrería de polvo pero a la vez todo como muy simpático, el argentino cachondo perdido desde antes de cruzar Princesa, era evidente que en esas condiciones no llegaríamos a ningún sitio.

En cuestión de veinte min. llegamos a la casa. Allí nada más entrar hace un par de llamadas telefónicas, deja la carpeta encima de una mesita tras anotar algo y se recuesta a continuación en el sofá, invitándome a acercarme.

-¿sabés? ahora vendrá esta mina que debe recoger unas cosas, saber que viene de camino como dice me pone bastante caliente y el que vos estés acá conmigo-

Se le quitó incluso el acento que tiene al hablar cuando ella se presentó antes de lo previsto y por supuesto sin llamar al timbre. Cuando accedió al salón yo aún me encontraba abrochándome los botones de la camisa, me observó pero no dijo absolutamente nada por lo que o ella también le engaña o es medio retrasada y vive aceptándolo, no sé, lo que sí tengo claro es que por muy actriz que sea yo no la había visto antes en mi puta vida.


lunes, 10 de marzo de 2008

>> KK

Menuda mierda. Ayer domingo fue un día con su noche para olvidar cuanto antes, en todos los sentidos, ya lo dije y lo repito. No salió una a derechas, nunca mejor dicho, ni el barça, ni Astérix ni su puta madre: Un asco.

Con cierta frecuencia me da por pensar en cómo hay gente que sigue viviendo y no les da por pegarse un tiro o tirarse al mar, hay vidas por ahi, está más que claro, que están casi estorbando. Una de estas gentes vive ahi en Coslada, se llama Gregorio y es un tragapanes. Me ha de recoger en la renfe pues no conozco ese pueblo y no tengo ni puta idea de moverme allí.

La movida consistía en cenar con su ex novia y su respectivo. Simplemente esta síntesis tardó en explicármela más de un cuarto de hora y no porque este hombre sea tartamudo, no, es que parece ser que es así de inútil para con todas sus cosas, no le corre la sangre o yo no sé qué pasa. Está jodidamente enganchado a esa mujer, me contó los comienzos con ella y los finales y luego ya por fin, los propósitos.

Cuando llegamos al restaurante ya estaba dentro allí la pareja feliz, ella me examinó de forma descarada al incorporarnos y yo en sus primeros tres movimientos me percaté que era más puta que yo y que el Gregorio no debía follarla en condiciones. Este se pasó babeándola media cena y ella dándonos explicaciones de su puta vida, contando los m2 habitables donde hará nido con el otro pervertido y lo feliz que piensa ser. A mi comienza a joderme con sus historias, y le digo la verdad, que ese es un pueblo de lo más simple y que yo no hubiese comprado ahi ni muerta, bueno y también le dije que es mejor hacer como nosotros dos, un chalet por el mismo precio, en Boadilla del Monte, con su garaje y su trastero.

Como a todo esto Gregorio no reacciona le hago entrar en la conversación preguntándole para cuándo finalmente compraremos el audi. Ella parece ir bajando de su puta nube y me pregunta en qué trabajo y como sabía de antemano el curro de ella contesté que trabajo de administrativa también, esto la animó pero la bajé los aires que se traía hasta entonces cuando supo que yo ganaba 300 euros al mes más que ella, que se joda. No se puede ir por la vida enamorando a subnormales y luego largarse con el primero que la vacila.

Desde muy al principio supe que el pervertido la folla como a ella le gusta y sin embargo el Gregorio debe ser que no sabe ni follar siquiera, con tan poca sangre no me extraña. Cuando nos vamos de allí y me pregunta cómo veo yo el tema me da reparo decirle lo que pienso realmente así que lo suavizo un poco y le digo que a ella se la ve bien, que pienso que ese tipo la debe dar lo que ella quiere, sea lo que sea, y entonces él me cuenta mirando al suelo que a ella siempre la han gustado los tipos agresivos, así, chulos y todo eso y que él no puede aparentar lo que no es.

Como me parece sincero yo le intento animar diciéndole que pruebe a hacérselo mirándola a los ojos, que eso no es difícil y a todo el mundo le gusta, ni siquiera me entiende y vuelvo a pensar ahí si no será en parte retrasado, tonto del todo no es porque luego me para en mitad de la calle y me pregunta cuánto cobro por chupársela.

El caso es que ante tanta simpleza junta me hizo sentirme un poco absurda y ya me cansé de descifrarle y le contesté que gratis se la puede chupar la tipa esa si no fuese así de tonto. Discutimos y bajé las escaleras de la renfe mientras se quedó allí diciendo que soy una puta y yo no sé qué más, yo que sé, qué más da lo que digan esa clase de subnormales, tiene que haber de todo en esta vida pero es que yo de llamarme Gregorio me pegaba un tiro, vaya vidas, y hay hijas de puta por ahí con suerte, con la suerte de conformarse con cualquier guarrada, creo que es evidente que no me apetece nada contar penas.

viernes, 7 de marzo de 2008

>> Simpleza colonial

Por la plaza de Colón hay alguna que otra banderita de este país que es espanya y no me apetece mucho moverme por ahi, las banderas me dan casi miedo pero anoche allí estuve. Y la plaza, por cierto, me gusta quince veces más la de Barcelona ahí con la rambla tan chula y el tío apuntando a vete a saber dónde porque allí me es imposible situarme.

Me abre la puerta un tío raro de cojones pero que no era el principal que sería el mayordomo o cualquier otro currante abrepuertas. Me hace pasar a una salita, que no salón, de espera de estas que a mi me ponen nerviosa. Al momento el tío raro viene de nuevo, me invita a tomar algo y después me trae un vodka. Lo termino y pido otro pues allí no viene nadie y la campanilla que había en la mesita imaginé que sería para pedir. Me lo estoy terminando cuando viene otro, medio calvo y este sí es. Me saluda como si me conociera de toda la vida,

-Clara, mi vida! perdona por hacerte esperar, estaba en una videoconferencia con Bruno, se fue a Bruselas, ¿lo sabías?

Él, que se llama Julio Alberto y se deja llamar por el señor y de usted, le pide al tío raro que no nos moleste nadie que tiene para una hora - hora y media, y esto lo dice revisándome mientras me coge del brazo y me acompaña hacia dentro. Me hace pasar a una sala y cierra la puerta tras de sí y tan sólo está encendida una lámpara, allá, encima del billar con el triángulo y las bolas colocadas, encima, y la negra en el medio la distingo justo cuando le tengo en mi espalda bajándome los tirantes del vestido que adquirí el otro día. La bola blanca no estaba. Donde debiera estar me hizo subirme a mi tras sacarme los zapatos él mismo, ahora llevo las uñas de dedos y pies color gris plata, se llevaron un beso.

Allí en lo alto del billar se echó encima de mi tras retirar el triángulo y mientras me masajeaba absurdamente un pecho con la otra mano se ayudó para comprobar la entrada de mi vagina y meterme la polla. No estaba cómodo pero la postura le excitaba y no poco, podía apreciarlo por su respiración. En un momento dado paró su empuje en seco estremeciéndose y se retiró ayudándome a incorporarme y llevándome hacia el sillón y allí se echó de nuevo sobre mi y ayudándose otra vez de una mano me la metió comenzando un misionero medianamente aceptable.

Lo que sucede es que así tal cual, sin estimulación de ningún tipo, me es díficil lubricar algo que no sea mero aburrimiento y así pasó, y también porque él, con esa familiaridad cuando el Bruno y eso parece mostrar que esté acostumbrado a ese tipo de encuentros y a besar pies en el billar y entonces no le encuentro yo la motivación al asunto. Aparte que yo pienso que no hay polvo más simple que un triste misionero sin previos, lo juro, y creo que aquí se jodió de nuevo la racha.

miércoles, 5 de marzo de 2008

>> Una cosa de chinos

Si te dicen así en frío que el tipo se hace llamar Angel Javier, que ni una cosa ni la otra, -todo junto-, Angel Javier, y que vive ahí en Móstoles, pues así como digo, en frío, suena más bien a pijo pero no. Le acompañaba a la boda con iglesia, padrinos y votos de amor eterno, de su hermana la pequeña.

Yo no sabía que se celebrasen ceremonias de estas entre semana pero así es, y la misa, como es costumbre, acabó siendo algo insufrible pero hube de mirar prácticamente todo el tiempo al altar pues la que fuese mi suegra no nos quitaba la vista de encima, entiendo que porque este a sus 33 años no ha conocido otro hogar que el de su infancia salvo ahora que por trabajo pasa semanas enteras en Burgos y de ahi surgí yo.

El cura dijo algo acerca de Santiago el apóstol y se me fue el pensamiento al camino de santiago y entonces también al semi quijote ese que tienen de bronce o lo que sea en el medio de Burgos, que se entiende que está haciendo un alto en el camino de su peregrinar, le pregunté al Angel Javier este si se había hecho una foto o algo con ese tío y ni siquiera sabía de qué le hablaba, qué sosera, hacía juego con la misa.

A los novios, ya en la puerta y más cerca de dios que antes, les tiramos fotos, procurando Angel Javier que yo siempre portase una cámara, y también les tiramos arroz, piropos y al fin besos tras tanta euforia. Ahi entre beso y beso este chico se animó un poco y ya se permitía el sostenerme con el brazo mi cintura, darme un par de picos, mirarme el escote, todo ello acompañado de una terapia de ánimo en la que repetía constantemente que todo estaba yendo bien.

Ya con el sorbete de limón se lo escuché por cuarta o quinta vez y como lo alternaba colocándose los huevos o se frotaba las manos y actos por el estilo supe que a su vez todo ello le excitaba, se lo hice saber y entonces se olvidó de la terapia subiéndole el color del vino a la cara, carraspeando para contestarme que pensó que iba a ser más jodido pero que sin embargo estaba como cachondo, que se sentía bien.

Su padre pagaría por follarme, estoy segura, se despidió de mi por dos veces, fue todo lo que se llevó, cuatro besos, aunque gratis. No tardamos en salir de allí, por todos era conocido que Angel Javier con ese nombre no baila y yo lo agradecí porque me mataban los zapatos.

No sé por qué ni me importa pero me llevó a la casa que después me dijo era de su hermana, pasamos a la habitación del fondo donde había, supongo que suyo, varias cajas, grandes, apiladas, y una bolsa de deporte a los pies de la cama. Se echó sobre mi y en el cuarto de hora escaso que allí estuvimos le dio tiempo a bajarse como pudo los pantalones, a llenarme el cuello de babas y a prepararse para nada porque por más que lo intentó no hubo forma de mantener la erección. Achacó el percance explicando que había bebido mucho pero no lo creo.

Aunque me sigue resultando el tema este muy curioso en realidad los motivos reales me dan igual puesto que no pienso volver a verle, ni aporté remedio ni lo pidió tampoco, mejor, al cabo de una hora o así estaba yo aquí ya en casa que tenía pensado venirme a buscar el partit del barça por cortesía china, como chino parece a veces el asunto gatillazo.

lunes, 3 de marzo de 2008

>> Bien jodida

El sábado no quedé con nadie con la intención de ver ganar al barça en el calderón pero me tuve que joder por cómo fueron las cosas, a otra vez será. Anoche estuve en la calle Alberto Aguilera ya casi al final, si lo llego a saber que queda tan allá me voy al metro de san bernardo, no me apetecía una mierda andar en tacones.

Me fumé un cigarro antes de subir, hice bien puesto que este hombre no permitía fumar en la casa, le tendría que dar igual porque aun fumando tardaría un día y medio como poco el llegar el humo de una habitación a otra.

Después de servirme el primer vodka mientras observo el exterior por las cristaleras me cuenta que ha adosado dos pisos comprando el de al lado y que eso que pisamos y pienso que es el parquet, que sí, lo es, y que luego hay otro que no lo es, que aquello es sintasol o como se diga y me pone cara de que vivo en un piso con sintasol y se saca el dinero del bolsillo y me lo alarga sirviéndose otro whisky. Al momento me cuenta que no estaremos solos, se va desabrochando el pantalón incitándome a beber, la chica en cinco minutos estaba ya arriba.

Lo pasamos bien los tres, sí, a él le gustó más la cara de mi luna, a la chica, Noemí, no la desagradaba al parecer la polla de este y a mi tampoco su lengua, caliente, abajo, comiéndome el coño. Encantados, ambos, cada uno a lo suyo, fueron siguiéndome en mi arrastre de irme a colocar, de nuevo, frente a las cristaleras.

Me estuve ahí un momento con el sonido de su boca succionándome mientras él gemía por la morena que seguía chupándosela, me pegué al cristal en el intento de observar madrid pero desde la posición en la que me encontraba con la cabeza y los ojos hacia atrás vi poca hostia, el reflejo de la lámpara en el cristal y un azul oscuro de no sé donde.

Consiguió que me corriera y acto seguido se me incorporó echándose sobre mi apartando a la chica y metiéndome la polla de una sola vez, perfecta. Elevó mis piernas sobre sus hombros y comenzó a follarme bien, aumentando el ritmo de su empuje. Frenó de pronto, sacándola y se incorporó a echarse un whisky, tal cual.

Le observé desde el parquet que yo no tengo, no, y me sonrió diciéndole a continuación a la morena,

-ahora cuando me corra con Clara vengo a darte por el culo-

Y eso hizo aunque esta vez sí supe colocarme de forma que me senté encima suyo y de frente tenía un trozo de la ciudad tal y como quise antes.


En qué zorreas